![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgssTRVKXY1wopgCCQw8TyfuSvYVmlOkz6r-DIyu6e2ecS1xtY-l2RKew7DIfkvjM6iw9atifxeYcTUCfgAAIXd6Enisi184PR2HfeFkduZXnP4-bsFOfdP8-q5d3dvu05Ok2cXw3EYdo2o/s320/314989_2435766809313_1105997546_2859871_1828460304_n.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhsMxbXavGcPeryrAaOhRZRsUBQbyYt_4NBh_d9C2KGCBXd0dQ_8EMYC5CocDEx_xKkOmCZd2TaHJUZbMNUqhgZxMB1V7TZvbpbifEYLpq8wCNrzb-xrVsg-aFSxODXKtoDacg-IOe7I8oX/s400/314479_2435765089270_1105997546_2859868_709425126_n.jpg)
Quizás mañana vuelva estar pendiente de alguien. Pero por el momento, al ver a veces de a poco cosas que fluyen, no esta mal acostumbrarse a estar sola.
Podría decir que de a poco estoy volviendo a ser yo, sin ese sentimiento de amar tan profundo que se hace complicado para el ser interior.
Sigo caminado, otra cosa no me queda, pero de lo que puedo estar segura es de que hay un vacío, y tiene nombre. Aun así, sigo adelante.
Otra no me queda, ni debería de quedarme.